GRUPO MOTERO MURCIANO, QUE NOS DEDICAMOS A DISFRUTAR DE NUESTRAS MOTOS Y AMIGOS.

sábado, 5 de agosto de 2023

RUTA MOTERA A TRAVÉS DE LAS SIERRAS DE CAZORLA, SEGURA Y LAS VILLAS, ALPUJARRAS Y FILABRES 3er. DÍA. GÜEJAR SIERRA ==> SIERRA DE LOS FILABRES.

 

Sierra de los Filabres, el oasis de Almería.

Para comenzar nos ponemos en situación, la Sierra de los Filabres, nuestro principal destino de hoy, es el más importante macizo montañoso de Almería, ubicado en el noroeste de la provincia separando el desierto de Tabernas del valle del Río Almanzora.
Esta Sierra de los Filabres, conocida por el Observatorio Astronómico Hispano-Alemán de Calar Alto, tiene una cara sur que pierde rápidamente sus más de 2.000 metros de altitud y una cara norte con un pinar infinito.



ITINERARIO:

Hoy ha amanecido un día con un cielo azul luminoso, el aire limpio y fresco que parece recién estrenado, nos encontramos a casi 1600 metros de altitud y eso se nota.
La previsión es de un día de calor, por lo que necesitamos salir lo antes posible, pero sin prisa, hay que disfrutar de todos los momentos, tanto de los de moto como de socializar entre los compañeros.
Comenzamos con un tranquilo y magnífico desayuno buffet en el hotel, preparamos las motos y una vez todos listos comenzamos la jornada motera.
La idea inicial es subir lo más posible a las cercanía del Veleta, con sus 3.396 metros es la cuarta cumbre más alta de España.
Conducimos en grupo por una ascendente, curvilínea y buena carretera A-395, el ánimo fuerte y alegre, ya que la subida a este pico es un gran atractivo, sobre todo por la facilidad de conducción y el poco tráfico que nos encontramos.
Tras unos kilómetros de subida llegamos hasta La Hoya de la Mora, donde nos encontramos una barrera que nos corta el paso.          ¡Punto final de nuestro ascenso!
Aparcamos las motos y nos dedicamos a disfrutar del paisaje, del entorno y del frescor ambiental que tenemos en este lugar, aproximadamente 17ºC.
La recompensa del entorno y las vistas desde esta atalaya y durante todo el camino, es suficiente motivación para llegar hasta aquí.

















Tras un buen y animado rato de disfrute en este lugar, volvemos a las motos y comenzamos un tranquilo y relajante descenso hasta el mismo centro urbano de Güejar Sierra.




Iniciamos el descenso y al llegar al collado de las Sabinas, junto al albergue militar General Oñate, en la rotonda tomamos la carretera A-4025.   Este tramo de carretera estrecha, serpenteante y con maravillosas vistas, nos lo tomamos con mucha tranquilidad, conducimos muy juntos, queremos aprovechar esta bajada para hacerla de una manera relajada y segura, ya que hay algunos puntos donde se estrecha bastante la carretera y la visibilidad se reduce.
Una vez alcanzado Güejar Sierra la cruzamos a través de su arteria principal siguiendo la carretera GR-3200. Esta carretera va siguiendo la ribera del embalse de Canales, es estrecha y con algo de tráfico, pero la visión del azul turquesa de sus aguas es agradable.
Pasamos la localidad de Pinos Genil y en el siguiente cruce giramos hacia la derecha para seguir la carretera GR-3201 en dirección Quéntar, pasamos el embalse del mismo nombre a la derecha y proseguimos hasta un solitario cruce donde dejamos la carretera y seguimos en dirección a la localidad de La Peza .
Este tramo lo disfrutamos mucho, ya que al ser una buena carretera, con curvas amplias y buena visibilidad, aceleramos un poco para divertirnos con esas curvas.
La entrada a la localidad de La Peza y sobre todo la fuerte bajada por una estrecha callejuela nos sorprende, la hacemos con mucho cuidado ya que no tiene vuelta atrás.
La Peza está situada en la parte occidental de la comarca de Guadix, en la provincia de Granada, de poco más de 1100 habitantes, asentado frente a la cara norte de Sierra Nevada, su origen se remonta al tiempo de los romanos, donde fue un importante campamento militar.  Pasamos junto a los restos de un castillo del S.IX-X, cruzamos su plaza principal o plaza de España y tras salir de ella, tomamos la carretera GR-4104 en dirección a Benalua de Guadix.
La carretera comienza un suave ascenso hasta el mirador de La Peza, donde hacemos una parada para admirar el paisaje y el conjunto monumental de este pueblo.



vistas de los restos del castillo S.IX

Vistas de La Peza desde el mirador del mismo nombre.



Seguimos por esta estrecha carretera que se trata de un tramo interurbano en el que hay un tráfico importante de vehículos pesados, cruzamos el puente de La Peza, la carretera discurre por una franja bastante desertica, se aprecian zonas de cárcavas, apenas vemos manchas boscosas, etc.  Poco después llegamos a la localidad de Los Baños, apreciamos algunas casas cuevas con bonitas fachadas que hay en este pequeño nucleo urbano, incluso algunas por su tamaño parecen ser utilizadas como bodegas, almacenes, etc.
Los Baños es una localidad perteneciente al municipio de Cortes y Graena, situada en la parte central de la comarca de Guadix.
Rápidamente llegamos a la siguiente localidad de Purullena, ya que apenas las separa 2 kilómetros, donde me sorprende un número mayor de casas cuevas, parece ser algo normalizado y cotidiano en estos lugares de serranía y calor intenso.
No en vano Purullena es una de las muestras más representativas de estas casas cuevas.
Situada en la Hoya de Guadix, en una vega regada por tres ríos, su perfil recortado de cerros de arcilla y, horadadas en éstos, sus singulares casas-cueva, que indican su presencia asomando sus chimeneas blancas sobre el fondo rojo de la tierra.
Sin darnos cuenta y siguiendo ahora la carretera A-4100 entramos en la ciudad histórica de Guadix, la cual dista apenas 4 kilómetros de Purullena.
Ciudad milenaria, llena de vida, luz, color, tradición, cultura y gastronomía.
Conjunto histórico y monumental, bendecida por su ubicación geográfica privilegiada, con una gran variedad de monumentos, aunque su principal atractivo es el paisaje moldeado por el viento, produciendo una amalgama de colores rojo, ocre, verde y azul que sorprende gratamente.
A finales de 1489, la ciudad fue tomada por los Reyes Católicos, y esto fue seguido por una importante reorganización social urbana. La ciudad está formada por casas llenas de gente que se amontonan, presididas por la importante Catedral y orgullosa Alcazaba, antigua fortaleza musulmana, detrás de la cual la ciudad se extiende hasta mezclarse con el tortuoso paisaje de los Bad Lands.
De una forma tortuosa por el tráfico y las obras vamos poco a poco cruzando esta ciudad, repostamos en uno de los varios surtidores que encontramos en ella, tras lo cual y siguiendo la carretera N-324 y posterior A-4101 desembocamos en la autovía A-92.
Seguimos por ella durante unos 52 kilómetros hasta tomar la salida nº 356 /La Estación-Aulago, en la rotonda y por un puente elevado cruzamos la autovía y tomamos la carretera AL-4404 en dirección Aulago/Calar Alto.
Una buena y bien conservada carretera, inicialmente con largas rectas, que según vamos adentrándonos en plena sierra de los Filabres, van apareciendo las curvas.
A partir del pico de Layón la carretera se convierte en un continuado y serpenteante ascenso, curvas rápidas a derecha e izquierda, una detrás de otra, que casi no te permiten quitar la vista de la carretera para admirar el paisaje según vamos ganando altitud.


La sierra de los Filabres es un rincón único que sorprende por su belleza y biodiversidad, siendo el principal macizo montañoso de la provincia de Almería. Tiene una longitud de 63 km y una anchura de 28 km, con una superficie total de 151 000 hectáreas, y la línea de cumbres se mantiene en buena parte por encima de los 2000 m, siendo su cota más alta Calar Alto (2.168 m s. n. m.).
De estas montañas del noroeste de Almería salió el mármol de la Alhambra y el de la Mezquita. Al sur, el desierto de Tabernas, escenario de cien westerns. Al norte, el valle del Almanzora y sus blancos pueblos de estirpe morisca: Serón, Bacares, Velefique... Hay una vía verde por donde anduvo un tren minero y un telescopio en la cima, el mayor de Europa.
Si hay algo caracteriza a los municipios que integran la Sierra de los Filabres son sus pueblos encalados y villas de pizarra, su carácter tranquilo, sus pocos habitantes y cuestas empinadas y laberínticas calles.


Tras un sinuoso recorrido de aproximadamente 30 kilómetros desde la salida de la autovía, alcanzamos el punto más alto de esta sierra de Filabres (Almería), me refiero al Calar Alto (2.168 m. s. n. m.), donde se encuentra las instalaciones del Centro Astronómico Hispano en Andalucía (CAHA), también conocido como Observatorio de Calar Alto, es el observatorio astronómico más grande del continente europeo. En este apartado lugar sobrecoge las vistas tanto de las cúpulas que albergan los telescopios como los paisajes que se tienen desde esta altitud.







Hacemos una parada más larga con el fin de admirarlo todo, comentar el lugar y sus panorámicas, hacernos algunas fotos y decidir por qué vertiente descender para continuar el viaje de vuelta hacia Murcia.


Finalmente y sin un rumbo determinado decidimos bajar por la carretera AL-4404, en dirección a Gérgal, esta bajada es muy agradable por discurrir entre bosques de pinos, el aire se mantiene fresco a esta altitud y la carretera tiene un firme bueno.


Poco después dejamos esta carretera y continuamos por la AL-4406 que nos llevará a través de una estrecha y curvilínea carretera hasta el cruce de la carretera de Verifique/Tabernas, pasando antes por las localidades de Olula de Castro y Castro de Filabres.


Indicar que este tramo de estrecha carretera, con fuertes y continuadas curvas sin casi visibilidad, ni arcenes y con una inexistente señalización ni mantenimiento, donde el calor aprieta y los barrancos apenas dejan paso al paisaje, se convierte en una bajada dura, en la que hay que estar usando el freno continuamente.




Una vez alcanzado el cruce anteriormente indicado, hacemos una parada para decidir la dirección a seguir, un lugar para comer y de paso, engrasar una de las cadenas que da muestras del esfuerzo realizado.
Decidimos seguir en dirección Tabernas, para desde allí tomar la carretera A-349 en dirección a Tahal, pequeña localidad donde pretendemos comer dada la hora que es.
Esta magnífica y ancha carretera de dos carriles y amplias curvas, nos permite enroscar puño y disfrutar de la velocidad.
Poco después y en el mismo cruce para bajar al pueblo del Tahal, se encuentra Rubira bar-restaurante, una pequeña venta con una escasa terraza donde paramos a descansar y comer.





Un menú bueno y a un precio acorde es el dictamen de todos, la comida se desarrolla en un grato ambiente y al finalizar la misma nos despedimos, ya que la vuelta se realizará por distintos caminos.
Partimos todos a la vez, pero antes de llegar a la siguiente localidad de Macael nos separamos, nosotros seguimos por el camino más lógico y rápido, ya que queremos volver por la autovía A-7.
Llegamos a Macael municipio de Almería, se encuentra en la parte meridional de la comarca del Valle del Almanzora, en el año 2021 contaba con 5.449 habitantes. Se encuentra situado a una altitud de 538 metros y a 75 kilómetros de la capital de provincia, Almería. Este municipio es conocido por sus canteras de mármol.
Tras pasar este pueblo y Olula del Río, tomamos la autovía A-334 y la seguimos hasta la Alforquia, donde la dejamos por estar en obras y proseguimos por el antiguo ramal hasta confluir en la autovía del Mediterráneo A-7.
Una vez en ella, activamos el control de velocidad y nos ponemos cómodos para hacer de un tirón la hora y cuarto que nos marca el GPS para llegar a Casa.
Una vez en Murcia damos por finalizada esta hermosa, intensa y calurosa ruta motera por estas impresionantes sierras.

viernes, 4 de agosto de 2023

RUTA MOTERA A TRAVÉS DE LAS SIERRAS DE CAZORLA, SEGURA Y LAS VILLAS, ALPUJARRAS Y FILABRES 2º DÍA. IRUELA ==> GÜEJAR SIERRA.

Iniciamos este segundo día de recorrido motero a través de varias sierras, en este caso iremos desde la localidad de Iruela en la sierra de Cazorla (Jaen), a la sierra de Las Alpujarras (Granada). 
Amanece una mañana fresca con un cielo limpio, y desde el balcón del hotel tenemos unas preciosas vistas del castillo y aledaños de Iruela, que nos llenan de emoción y alegría para comenzar esta segunda jornada motera.



Tras un buen desayuno en el hotel, nos disponemos a preparar las motos y comenzar el recorrido. En esta ocasión tenemos por delante 315 kilómetros repletos de curvas y lo más importante, de vistosos paisajes, y de bonitos y encalados pueblecitos que llenan esta preciosa sierra de Las Alpujarras granainas.



ITINERARIO:

Iniciamos el recorrido por la carretera A-319 en dirección a Cazorla, que tan solo nos separan 2,3 kilómetros del centro de esta localidad.
Cazorla es una ciudad de calles estrechas, abierta, hospitalaria y turística; es la principal localidad de estas serranías de Cazorla, Segura y las Villas. Asienta su blanco caserío a la sombra de la Peña de los Halcones, donde se erige majestuoso el Castillo de la Yedra.
Cruzamos y dejamos atrás esta preciosa villa y continuamos por la misma carretera, ahora comenzamos un ascenso hasta llegar a un cruce que tendremos a la izquierda, en este cruce dejamos la carretera que traíamos y conducimos ahora por la A-322. Una estrecha y sinuosa carretera sin apenas señalización, que discurre entre amplios campos de olivos, que nos obliga a circular a una velocidad moderada por tener apenas visibilidad en las curvas y ser una carretera con algo de tráfico local.
Esta carretera que une Cazorla con el municipio de Jódar, tiene su paso por la localidad de Quesada, es una carretera catalogada dentro de la Red Básica Intercomarcal de la Red de Carreteras de Andalucía, en la provincia de Jaén.
Alcanzamos la villa de Quesada y tras bordear una rotonda, la calzada mejora su estado y proseguimos por la carretera A-315 que nos introduce por el centro de esta población.
Quesada es un municipio perteneciente a la provincia de Jáen, con una población de poco más de 6000 habitantes, de origen musulmán, podemos ver la Iglesia de San Pedro y San Pablo, la Iglesia de la Inmaculada Concepción, la Plaza de la Lonja, el Arco de los Santos, el Arco de la Manquita de Utrera o el Rincón de la Poesía, etc.
A la salida de esta localidad tendremos dos opciones para continuar el recorrido;
-La primera seguir por la carretera A-315, una cómoda vía que ha sido reparada y acondicionada para el tráfico.
- La segunda opción, y que fue la elegida por nosotros, es proseguir por la carretera básica A-6206. Su trazado se desarrolla en dirección a Pozo Alcón, pasando por dos puntos emblemáticos que queremos conocer, el puerto del Tiscar y la cueva del Agua.
El trazado de esta carretera y la presencia de construcciones defensivas (castillo de Piedras Negras, castillo de los Rosales, atalaya del Infante D. Enrique, etc.), dan una idea de la importancia de este paso natural a lo largo de la historia.
La carretera se desarrolla gran parte a media ladera, por lo que ofrece unas amplias y hermosas vistas, siendo el puerto del Tíscar la que mejor ángulo de vista podemos encontrar, casi un campo de visión de 360º.


En principio y tras salir de Quesada nos encontramos una carretera optima para la conducción, con un firme en buen estado, curvas no demasiado abiertas y con una pendiente ascendente continuada entreel 5 y 7%.
Tras alcanzar el Puerto de Tíscar y las estribaciones de la Sierra del Pozo, la carretera se estrecha y sin arcenes, desciende hasta el valle del río de La Canal, con pendientes que no superan el 5%.
Poco después de sobrepasar el Puerto de Tíscar, muy próximo a los restos de la atalaya del Infante D. Enrique de principios del S.XIII y tras cruzar el túnel de Tíscar, encontramos un cartel que nos indica la entrada a la bajada de la cueva del Agua de Tiscar.

vista del túnel de Tiscar.




La cueva del agua de Tiscar es una preciosa gruta natural situada en una estrecha y profunda garganta, y sobre la que el agua cae en cascada. Su espectacularidad ha hecho que la Junta de Andalucía la declarase Monumento Natural.
























Tras la obligada visita a este precioso lugar, retomamos las motos y proseguimos el itinerario.
Continuamos por la carretera A-6206 en dirección Pozo Alcón, la distancia que separa Quesada de esta localidad es de 31,2 kilómetros, de curvas y bonitos paisajes.
Aproximándonos a este municipio jienense y tras pasar una sucesión de curvas muy cerradas, el paisaje se abre y su aspecto cambia radicalmente, pasando de una zona de montaña, con bosques que le dan ese color verdoso al paisaje, pasamos a una zona prácticamente llana con pequeños cerros aislados , con bastantes cárcavas de un color rojizo, que le dan un aspecto desolado y de un terreno que bien podría ser de otro planeta.
Tras pasar Pozo Alcón, continuamos por una cómoda carretera A-315, con largas rectas que atraviesan pequeñas zonas de arbolado de pino carrasco y que nos llevan hasta la cabeza del enorme pantano del Negratín.
Este gran embalse está situado en la cara norte del Cerro del Jabalcón, y es conocido por los lugareños como “El Mar del Altiplano”.

vista áerea del embalse del Negratin.

El pantano del Negratín fue inaugurado en 1984, y es el tercer mayor embalse de Andalucía, con una longitud de unos 20 km y una anchura máxima de 1,5 km, se construyó sobre el caudal de río Guadiana Menor.
Proseguimos por la parte trasera y baja de la pared del embalse y seguimos la carretera GR-7100 que nos llevará en tan solo 17,6 kilómetros a la entrada de la autovía A-92 N, por ella conducimos hasta la salida de Guadix.
Cruzamos esta ciudad milenaria, histórica y monumental, llena de vida, color, tradición, cultura y gastronomía. Repostamos en una de las gasolineras que encontramos por el interior de esta luminosa ciudad.
Tras salir de esta urbe por la carretera N-324, enlazamos poco después con la A-4101 y la seguimos en dirección Esfiliana, para rápidamente desembocar y continuar por la autovía A-92, para dejarla muy poco después en el cruce de Calahorra.


Justo a la entrada de esta localidad y bajo su preciosa fortaleza de estilo árabe, construida en los primeros años del siglo XVI, declarada Monumento Histórico-Artístico Nacional, hacemos una parada en la confitería Morillas, donde damos cuenta de un buen almuerzo.
Calahorra es el único paso entre las vertientes norte y sur de Sierra Nevada, su origen hace alusión al carácter defensivo de la villa. Durante la Edad Media fue llamada La Calahorra de Alquife. Fue la capital del señorío de D. Rodrigo de Mendoza, marqués del Zenete.
Durante la sublevación morisca de 1568, este villa fue de las primeras en levantarse. Tras la expulsión de los moriscos fue repoblada con cristianos viejos.





Abandonamos esta localidad y continuamos por la carretera A-337 en dirección al Puerto de la Ragua, que se encuentra a 13,2 kilómetros de Calahorra y unos 30 de Guadix; otro lugar emblemático por su altura 2000 m., y por ser el único paso natural en vehículo desde la cara Norte a la cara Sur del Parque Natural de Sierra Nevada. Este tramo de carretera con buen firme de asfalto es sinuoso y estrecho, pero en compensación, tendremos un paisaje espectacular y de una belleza única.








En este punto hacemos una breve parada para admirar las vistas y tomar algunas fotos, a sabiendas de lo que nos espera poco después.
A partir de aquí tendremos un tramo descendente por una carretera con buen asfalto, algo más ancha, con curvas importantes y atractivas vistas.
Continuamos descendiendo hasta un lugar desde donde nace una conocida pista de tierra, aquí el grupo se separa, dos siguen por la carretera y otros dos se adentran por la pista de tierra, más tarde nos encontraríamos en la localidad de Juviles.

Permanecemos por esta carretera A-337, pasamos un grupo de cerradas, simétricas y continuadas curvas, que nos hacen disfrutar en grande, siendo el preludio de una larga sucesión de diferentes curvas a derecha e izquierda, más o menos cerradas, con mejor o peor visibilidad, solitarias o próximas a pequeños núcleos de población alpujarreños, etc.
Alcanzamos y cruzamos la localidad de Laroles, a su salida cambiamos de carretera y seguimos la A-4130. Una estrecha y serpenteante carretera de montaña que discurre en dirección casi Suroeste trazando una forma de hoja de sierra y a media ladera de esta sierra, cruza el barranco de Poqueira y el río Trevélez.
Alcanzamos y cruzamos algunas localidades como son: Mairena, Mecina Alfahar, Válor, Yegén, Mecina Bombarón, Alcular y Juviles. En esta localidad hacemos una parada para descansar y esperar a los otros dos componentes del grupo que vienen a través de pistas de tierra.
En la terraza del único bar bajo un techo de hiedras, nos sentamos para esperar y refrescamos con frías cervezas acompañadas de buenas tapas.



Poco después aparecen nuestros compañeros y tras el descanso y refrigerio, decidimos continuar hasta el pueblo de Trevélez para comer en condiciones.
Llegamos hasta un cruce y a partir de aquí seguimos por la carretera A-4132; es una vía que asciende lentamente hacia Trevélez, que discurre serpenteante y en sentido opuesto al curso fluvial del río del mismo nombre, en dirección Norte y que nos sube hasta los más de 1.400 metros.
Al entrar en esta localidad granadina en la vertiente sur de Sierra Nevada, hacemos una parada en el restaurante “Piedra Ventana”, -un acierto total. En una de las mesas de la fresca terraza y frente a las motos tomamos asiento, el servicio bueno y rápido, el menú muy atractivo y acorde al precio.
Tras este agradable descanso decidimos continuar nuestro recorrido bajo un sol de justicia.
Sobre la misma carretera aunque ahora en dirección casi Sur, comenzamos un pronunciado y serpenteante descenso siguiendo el curso del río, hasta la localidad de Busquistar.
Desde aquí y hasta Pampaneira, tendremos una longitud de unos 10 kilómetros de una carretera que presenta altibajos al atravesar algunos barrancos, con una estrecha calzada con infinidad de curvas, con pocos y pequeños arcenes sin asfaltar, con eventuales explanadas para poder parar y disfrutar del paisaje así como hacer alguna fotografía.



Alcanzamos la localidad de Carataunas y experimentamos un fuerte descenso desde los 900 metros hasta los 500 aproximadamente y próximos a la localidad de Órgiva, la carretera tiene una anchura aproximada de 7 metros con escolleras laterales de mampostería que actúan como muros de contención, en ocasiones con quitamiedos metálicos o de madera. 
A lo largo de este recorrido las vistas son de amplios valles y barrancos profundos, predominando el paisaje de prados agrícolas que se intercalan con manchones forestales de robles, encinas, castaños, álamos, pinos...etc.


Alcanzamos y cruzamos la localidad de Órgiva y proseguimos hacia la conocida localidad de Lanjarón. Este tramo de apenas 8 kilómetros en los qué la carretera es muy similar a la anterior, pero con algo más de anchura y menos curvas.
Casi a la entrada de Lanjarón hacemos una parada en el mirador del Visillo.

vistas de Lanjarón.

vistas de Lanjarón

El calor aprieta y el cansancio se hace notar, empezamos a tener gana de dejar tanta curva y llegar al hotel para disfrutar de la refrescante piscina.
Aquí también nos separamos, uno de los componentes se va a investigar y disfrutar de pistas de tierra y otro acelera y continúa en solitario hacia el hotel.
Cruzamos esta localidad granadina y continuamos siguiendo el track en dirección a Durcál, pasando antes por las pequeñas localidades de Béznar y Talára, vamos siguiendo la N-323a.
Alcanzamos y cruzamos la localidad de Dúrcal, situada en la parte nororiental de la comarca del Valle de Lecrín, en la provincia de Granada.
A la salida de esta localidad, el cansancio, las horas de tensión sobre la moto conduciendo por esta interminable línea de curvas y sobre todo el calor, hacen mella.  Decidimos continuar por la nacional en busca de la autovía GR-30, con el fin de acortar el recorrido hacia Güejar Sierra, que es nuestro destino final para la ruta de hoy.
En la salida 18, pasados los túneles del Serrallo, tomamos la carretera convencional de un carril por sentido A-395, que llega hasta la estación de esquí de Sierra Nevada.
Es una carretera en muy buen estado, ancha, bien señalizada, con amplias curvas y preciosas vistas.
Tras alcanzar la pequeña localidad de Canales, junto al embalse del mismo nombre, llegamos al hotel El Guerrero, lugar donde nos encontramos con el resto de los componentes y tras un merecido y corto descanso decidimos cenar en la misma terraza del hotel.
El buen ambiente y la conversación hace que la cena se alarguen en el tiempo, quedándonos prácticamente solos en la terraza, finalmente decidimos subir a las habitaciones y descansar para hacer frente a la ruta que nos espera el día siguiente de vuelta a Murcia a través de la sierra de los Filabres.